Cinco claves que debes tener en cuenta a la hora de elegir una impresora
A pesar de que como dijimos cada empresa tiene sus propias necesidades hay una serie de claves fundamentales que nos sirven como base para elegir correctamente nuestra próxima impresora, y que por tanto debemos tener en cuenta desde el principio.
Dada la importancia que tiene la impresora como inversión tanto en el momento de la compra como en su uso posterior, ya que implica un gasto por cada página impresa, hemos querido hacer este artículo especial donde os daremos esas cinco claves que toda empresa debe tener en cuenta para elegir su impresora.
Volumen de trabajo
Es sin duda lo primero que debemos preguntarnos, ¿cuántas páginas vamos a imprimir al mes? De la respuesta dependerá la gama en la que deberemos poner la mirada, y ya de ahí podremos ir descartando modelos en base a las siguientes claves.
Debemos tener presente que es importante guiarnos por el número de impresiones óptimas que soporte una impresora, y no por el número máximo. Así, si vamos a imprimir 2.000 páginas al mes debemos optar por un modelo mas de consumo, mientras que si vamos a superar las 3.000 páginas al mes lo ideal es ir a por un modelo mas profesional.
Velocidad de trabajo y número de usuarios
Otro punto fundamental que hemos de tener en cuenta, además de la capacidad de impresión, es la velocidad de trabajo y el número de usuarios para el que ha sido diseñada una determinada impresora.
Así, si por ejemplo necesitamos una impresora diseñada para grupos de cuatro personas y con velocidades medias de impresión de 20 ppm nos basta con una impresora de la gama de consumo, pero si buscamos algo para un grupo de quince personas y que alcance velocidades medias de 50 ppm debemos apostar por la gama profesional.
Tipo de impresión que necesitas
Un dato esencial y básico. Si vas a necesitar imprimir en color y vas a hacer trabajos intermitentes lo mejor es una impresora de tinta. Por contra, si sólo vas a imprimir en blanco y negro una impresora láser sería tu mejor opción.
Ten claro las funciones que utilizarás
En este sentido es importante no tener una visión corta, es decir, no es bueno mirar a corto plazo, ya que a fin de cuentas la impresora es una inversión y como tal queremos amortizarla durante un tiempo razonable.
Si elegimos una impresora que no tiene funciones que no necesitaremos a corto plazo pero sí a medio plazo estaremos haciendo una mala elección, ya que se nos quedará pequeña probablemente antes de llegar a amortizarla.
Dentro de este punto entran una gran serie de funciones, como por ejemplo la conectividad WiFi y NFC, la impresión y el escaneado a doble cara, la impresión desde USB, la impresión móvil y las herramientas avanzadas de gestión y seguridad.
Es uno de los puntos más amplios y también más complejos, así que conviene trabajarlo y tenerlo bastante claro.
Formatos de papel, bandejas opcionales y consumibles
La última gran clave, pero no por ello la menos importante. Debes tener en cuenta los formatos de papel que necesitas y los que puede manejar la impresora que tienes pensado comprar, ya que si por ejemplo vas a utilizar ocasionalmente formato A3 y dicha impresora no lo soporta habrás hecho una mala compra.
También debes considerar el tema de las bandejas de papel si tu empresa tiene un volumen de impresión medio o alto, ya que el uso de dichos accesorios incrementa las posibilidades de alimentación de la impresora y reduce las interrupciones necesarias para reponer el papel gastado.
Finalmente el tema de los consumibles también es muy importante. Debes elegir impresoras que dispongan de consumibles de alta capacidad y compatibles, lo que nos reducirá el coste medio por página, y nos asegurará desde el principio un bajo coste de uso.
Ten en cuenta todos estos datos en el momento de elegir tu impresora, pero si aun así no sabes cual es la impresora que puede irte mejor no dudes en ponerte en contacto con nosotros y te ayudaremos a elegir la impresora que mejor se adecue a tus necesidades.