Uno de los mitos informáticos que más se ha oído es el que se considera perjudicial para la batería el cargarla mientras el portátil está encendido. Siempre hemos pensado que esa costumbre reduce la vida útil de nuestra batería y hace que cada vez la carga dure menos y tengamos que cargarlo más a menudo.

 

Hay que tener en cuenta que las baterías de los portátiles no son infinitas y que tienen un tiempo de vida determinado. El tiempo de vida de la batería depende sobre todo de la marca, los materiales y las características de la misma.

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A medida que avanza la tecnología, se van eliminando problemas en los distintos componentes que forman un dispositivo tecnológico. Lo mismo pasa con las baterías de los portátiles. Los avances permiten eliminar errores, o retrasar el comienzo de los problemas y la reducción de la vida útil, es lo que se llama obsolescencia programada.

La vida útil de las baterías se mide en ciclos. Un ciclo se cuenta cuando la batería se descarga al 100% y es cargada de nuevo. Normalmente las baterías rondan entre los 300 y los 500 ciclos. A medida que se van consumiendo los ciclos, la capacidad de almacenamiento de la batería se va mermando, reduciéndose hasta aproximadamente un 70% u 80% de la capacidad original.

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Teniendo en cuenta esto podemos decir que con los últimos portátiles del mercado NO es malo utilizar el equipo mientras está cargando, pues no tendría sentido tener que apagarlo cada vez que se agote la batería, ponerlo a cargar y luego usarlo. Los fabricantes tienen controladas todas estas deventajas y ya se encargan de reducirlas a la hora de fabricar sus productos.

A continuación os dejamos algunos consejos para la correcta utilización de vuestro portátil y el cuidado de vuestra batería:

  • No dejes descargar la batería completamente. En realidad no se recomienda y lo ideal es ponerla a cargar cuando esta se encuentre entre un 20% y 40% de su capacidad.
  • No cargues la batería a tope. Intenta no llegar a cargar la batería al 100% de su capacidad.
  • Usar un cargador adecuado. Controlar el voltaje del cargador ya que algunos cargadores pueden dañar la batería seriamente incluso llegar a fundirla.
  • Descargar la batería por completo una vez al mes. Esto permite que la batería se calibre.